miércoles, 17 de septiembre de 2025

ABRAZATE A TI MISMO - Mensaje de Yeshua - Pamela Kribbe




ABRAZATE A TI MISMO   

Mensaje de Yeshua

 

Amados amigos:

¡Yo Soy Jeshua!

Siente mi energía y mi abrazo; los amo a todos profundamente. Me inclino y me postro ante ti porque reconozco el coraje que se necesita para descender a un cuerpo humano y vivir tu vida aquí. Os reconozco de corazón porque somos Uno, como hermanos y hermanas.

No tendrías que considerarme como un maestro superior a ti. Estoy aquí para enfatizar nuestra semejanza, nuestra unidad. Te han enseñado a pensar en ti mismo como un ser insignificante y mi deseo es que reconozcas tu grandeza, la Chispa Divina que hay dentro de ti. No puedes vivir tu vida con plenitud y satisfacción sin conectarte con esta chispa interior, tu divinidad. Cuando estás desconectado de ella, te sientes desequilibrado y perdido.

Hoy vamos a hablar de una energía masculina y femenina y es un muy triste que, en vuestra sociedad, la energía femenina haya sido reprimida e incluso suprimida durante tantísimo tiempo. Te has acostumbrado a superar la vida con tu mente analítica, pero la mente no está destinada a actuar de forma independiente; la mente siempre estuvo destinada a ser un instrumento del alma. Cuando la mente actúa por sí sola, pierde sus raíces, su conexión con la Tierra y con el corazón. La mente puede ser increíblemente astuta e inteligente, pero si pierde su conexión con el corazón, se tirna destructiva en muchos aspectos. Hoy he venido a pedirte que restablezcas la conexión entre tu mente y tu corazón, entre el hombre y la mujer.

Para empezar, te pido que te conectes con tu corazón. Simplemente imagina que tu conciencia desciende desde la cabeza hasta el corazón, siendo consciente de que todo en lo que centres la atención, se animará y crecerá gracias a esa conciencia, de forma que, cuando centres tu atención en tu corazón, el centro de tu corazón se abrirá como una flor. Y gracias a que estamos unidos, nuestra energía combinada reforzará el poder que puedas sentir en el corazón.

Siente cómo cada uno de los presentes conserva su propio dolor, su propia alegría, sus propias luchas en la vida. Cada uno de nosotros anhela la conexión, el propósito, desea ser parte del Todo. Ese anhelo de propósito, de calidez, de amor que todos vosotros tenéis, en realidad es la mayor esperanza para la humanidad, porque ese anhelo de plenitud, ese deseo de conexión, es verdadero y os está conduciendo a otra forma de vida.

Siente el dolor que está presente dentro de tu corazón, la soledad que hay ahí. Me gustaría que te enfrentaras a ello abiertamente. En el corazón de todos y cada uno todos hay una sensación de estar confundidos y perdidos, de no entender el motivo por el que estáis aquí y cuál es el significado de la vida. Siente esa soledad, ese anhelo en tu corazón, e imagina que lo rodeas con tus manos muy suavemente.

En medio de tu corazón, quizá veas el rostro de un niño, anhelando o puede que incluso llorando. Acaríciale la mejilla. Tú posees la energía angelical dentro de ti, la energía de un ángel. Todos vosotros sois ángeles que han descendido en forma humana, y este mundo necesita ángeles. Aunque, antes de que puedas sanar a los demás, primero tienes que sublimar tu dolor, curar tu propio corazón herido,

Así que reconoce a ese niño herido que llevas dentro y acaríciale, consuélalo. Rodéalo con los colores que más le gustan mientras trabajas con él en un nivel de energía y dile: «Tú eres muy bienvenido en la Tierra, te necesitamos. Necesitamos su espontaneidad, tu originalidad, tu singularidad». Tu alma es una parte única del universo y está aquí en la Tierra ahora mismo para traer algo especial a este planeta, y eso solo puedes hacer cuando reconoces tu belleza interior, tu grandeza y tu fuerza.

El primer paso para vivir de una manera que sea acorde con tu alma, es reconocer que eres un alma y que eres mucho más que una personalidad humana que encaja en la sociedad. A medida que te conectas con tu grandeza como alma, también descubres al niño herido del que acabamos de hablar. Te das cuenta de cuáles son todas las formas en las que no encajas en la sociedad. Cuanto más te conectas con tu ser interior, más raro te sientes dentro de la sociedad. Eso es así. Y se requieren coraje y determinación para emprender el viaje espiritual que conduce a los niveles internos.

Ahora me gustaría hablar sobre las relaciones hombre/mujer o las relaciones de pareja sexual en general. Todos tenéis ese vacío interior, esa herida en vuestro corazón, y cuando no sois conscientes de ello, inconscientemente lo transmitís a vuestras relaciones. Tienes ese anhelo de unidad completa con el otro. Esa es la promesa que sientes cuando te enamoras de otra persona. Sientes una especie de éxtasis, sientes una esperanza de redención, de liberación completa de tu sensación de soledad, por lo que, cuando inicias una relación romántica, depositas en ella muchas esperanzas. Pero después de un tiempo, a menudo suele ocurrir que aparecen malentendidos y luchas entre ambos.

Muchos de esos malentendidos se deben al hecho de que no ves a tu propio niño interior herido. Al no asumir la responsabilidad de prestarles atención conscientemente a tus propias heridas emocionales, se crea una barrera en tu relación con la otra persona. Tú mantienes la esperanza de que la otra persona te comprenda, te libere, te salve, pero, por otro lado, te sientes frustrado porque eso no sucede.

Entonces, paradójicamente, cuando pretendes tener una relación verdaderamente sanadora, primero tienes que saber abrazarte a ti mismo. Tienes que enfrentarte verdaderamente a tu soledad y rodearla con tus brazos. Cuando realmente te conectas con tu alma y sientes la alegría que ella desprende, te sientes abundante, incluso si estás solo. Tu corazón se desborda y entonces ya no necesitas a esa otra persona para llenar el vacío que hay en tu corazón. Seguirán surgiendo problemas o desequilibrios y quizá la otra persona pueda ayudarte a ser más completo, pero, básicamente, tienes que cuidarte a ti mismo.

Para todos vosotros, seais hombres o mujeres, es de vital importancia que reconozcáis el dolor que se halla naturalmente dentro de cada uni ustedes como ser humano y que lo atendáis. A medida que uno mismo se trata con amabilidad y con delicadeza, comienza a reconocer su propia energía sanadora y, antes que nada, tiene que usar esa energía sanadora para sanarse a sí mismo.

Así que ahora imagina que un ángel está detrás con las alas extendidas a tu alrededor. Esa eres tú, tu energía femenina superior. Tú procedes de los reinos más elevados y por eso digo que somos iguales, por eso me arrodillo ante ti y alabo tu coraje. Siente la energía del ángel y permite que fluya por tu cuerpo. Quizá veas colores o sientas una cierta vibración y percibas si hay zonas de tu cuerpo que no están muy abiertas a esa vibración o que son un poco reacias a recibirla.

Cuando veas que hay partes de ti que se resisten a recibir la energía de tu alma, tu energía superior, no trates de forzarlas. Haz que tu conciencia sea aún más amable, tierna y bondadosa. Envuelve tu conciencia alrededor de ese bloqueo y di: «Te acepto, ya sé que hay una razón para que estés ahí». Cuando una parte de ti se siente bloqueada, es porque ese bloqueo tiene una razón de ser. Esa parte de ti puede tener miedo, sentir resistencia o ira, y no cederá al razonar con ella, al hablarle desde la mente. Y tampoco puedes disciplinarla o castigarla, porque no funcionará.

Para llegar a la parte más oscura de ti mismo, la parte de ti que se siente más temerosa y solitaria, necesitas amor: el Amor es la clave. Mira la cara del ángel que está detrás de ti. Ese es el rostro del amor: total y completa dulzura y comprensión. 

Dedica un momento a sentir realmente la presencia de la compasión y permite que esa energía fluya hacia las partes más profundas de ti mismo.

Esa es la energía que traerá el cambio a la humanidad: la Energía del Amor.

Cuando yo os miro, veo almas viejas y sabias, veo tristeza y sabiduría en vuestro ser. Algunos de vosotros os habéis se desanimado mucho acerca de la vida y quiero que sepáis que sois amados inmensamente y que os necesitamos donde estáis. ¡Vosotros sois la esperanza de un Mundo Nuevo!

Por favor, acepta este mensaje y abrázate; llénate de compasión y ánimo.

Gracias a todos por vuestra atención.

JESHUA

 
Mensaje canalizado por Pamela Kribbe

lunes, 15 de septiembre de 2025

DALE ESPACIO A LOS ÁNGELES - Mensaje de Madre María - Pamela Kribbe


DALE ESPACIO A LOS ÁNGELES       

Mensaje de Madre María

 

Amados, hombres y mujeres bellos:

¡Yo Soy María!

No estoy sola, estoy rodeada de ángeles. Ellos son vuestros ángeles, seres de luz que están conectados con todos y cada uno de vosotros. Sentid su dulzura, porque están aquí para vosotros. Cada uno de vosotros cuenta con ángeles de Luz a su alrededor que desean asistiros en vuestro camino en la Tierra.

¡Hazle sitio a estos ángeles! Permite que te rodeen a ti también con una vibración suave y ligera. Siente cómo el espacio donde te hallas se ilumina con su presencia. Desean darte algo, permíteles que compartan contigo la Luz del Hogar, las esferas a las que pertenecen, la atmósfera de Luz de donde proceden. Permite que estos ángeles te sanen.

Formamos un gran círculo a tu alrededor y nos gustaría disminuir el dolor y la pesadez que a menudo experimentas en tu vida diaria. La vida debería ser más fácil, más alegre y más amable, y eso comienza con el amor por uno mismo. El primer paso, es dejarse guiar por la energía de la Luz, la Dulzura y la Sanación que se te ofrece.

Imagina que todas las células de tu cuerpo se abren y que respiran Amor y Sanación. Hazlo muy conscientemente y di para ti mismo: «Recibo esta energía y dejo que fluya como si fuera una lluvia tibia desde la coronilla a mi alrededor». Esa energía, es una energía de la más alta vibración; no pretende forzarte en absoluto, sólo quiere ofrecerte tranquilidad, alegría y gozo.

Deja que fluya a través de la serenidad de ese espacio que hay en el centro de tu frente para que tu tercer ojo se aquiete y brille. Libérate del exceso de pensamientos; observa ese flujo interminable de pensamientos como algo de lo que puedes desconectarte, como algo que no es necesariamente tuyo. Permanece ahí, dejando que la energía del ángel fluya a través de ese lugar y ocupe el espacio que antes ocupaban tantos y tantos pensamientos innecesarios. Al ser consciente de tu interior,  regresas a ti y te liberas.

Ahora, deja que la energía del ángel descienda por la garganta hasta el corazón, llenando cuello, hombros y pecho. Deja que suceda por sí mismo y, aunque al principio no percibas nada, trata de sentir la alegría de los ángeles. Recuerda la libertad, el amor a la vida, la vivacidad del espíritu de las esferas celestiales, y llena con eso tu corazón. Suelta todas las preocupaciones y permanece completamente en el ahora. Deja que la energía fluya más profundamente y que te abra el abdomen, siendo consciente de que, cualquier espacio que abras para recibir esa energía, se llenará de inmediato con la suave vibración del amor.

¿No oyes los cánticos que los ángeles te dedican? Ellos te conocen y te aman incondicionalmente. No es un amor impersonal; ellos saben quién eres porque, al fin y al cabo, son tus ángeles. Ellos saben cuándo estás cansado o herido y ven dónde hay pesadez en ti; ellos lo saben todo.

Atrévete a confiar en ese amor y deja que fluya a través de ti, que fluya a través de tus caderas y muslos, hasta llegar a tu chakra raíz y al suelo que hay debajo de tus pies. Siente cómo los ángeles sostienen suavemente tus rodillas y hacen descender la energía hacia la Tierra.

Sintonízate con su gran conciencia. Ellos no ven en términos de correcto o incorrecto, no juzgan lo que haces o dejas de hacer en tu vida cotidiana, solo quieren amarte y recordarte quién eres realmente y el amor que te mereces.

Ahora te pido que profundices aún más, que vayas al interior de tu corazón y que, una vez allí, sientas que eres un ángel, que eres uno de ellos.

Interiormente, todos vosotros conocéis la Energía del Amor porque ya la habéis experimentado. Además de en la Tierra, habéis estado en otros reinos en los que habéis experimentado completamente la Energía del Amor, allí fuisteis sostenidos por ella y sentisteis el deseo de compartir ese Amor con todos los demás seres vivos.

Estos ángeles te dan su luz incondicionalmente ahora, pero tú también eres un ángel. Trata de comprender este hecho y acéptalo. Al aceptarlo, sientes que hay una semilla en lo profundo de tu corazón, un germen de la luz angelical que eres. Humanamente, puede sentirse como algo muy delicado, una semilla muy tierna, pero la energía del ángel es esencialmente indestructible, no puede ser destruida por ninguna fuerza. Es la «sangre» del universo mismo, de la cual todo está hecho.

La energía de los ángeles, como la del Amor, radica en la Libertad, no en la fuerza; por eso a veces parece como si hubiera sido ahuyentado o destruida. Pero, en realidad, no es así, ya que la energía del ángel siempre está presente y lista para ayudar cuando sea solicitada. Siente en lo más profundo de tu ser lo invulnerable e indestructible que eres y que, por el hecho de ser Amor, nada puede ocurrirte.

Siente el poder del amor. El amor se mueve a través de las defensas del miedo y la resistencia, porque el amor siempre reconoce la igualdad de los opuestos. El amor no enjuicia, ni crea separación ni dualidad, sino que siempre conecta y une. El amor puede parecer frágil, pero, en realidad, es todo lo contrario, porque cualquiera que se separa del amor es, de hecho, muy frágil. Se encuentra solo y vive con miedo y, por lo tanto, tiene que defenderse constantemente.

Tienes miedo de tu amor, de mostrarle al mundo tu profunda belleza, y por eso te ocultas y te defiendes detrás de los muros que tú mismo has construido. Sin embargo, eso es lo que te hace vulnerable, ya que siempre tienes que defenderte y protegerte. Cuando te atreves a izarte en la grandeza de tu propio amor, eres invulnerable. Actúas en favor del universo, en vez de contra él. Las Leyes Divinas que se aplican en el cosmos, actúan conforme a la Ley del Amor, que es la Ley Suprema, de manera que, si respetas esa Ley, nada te pude pasar.

Te has acostumbrado tanto a vivir dentro de muros defensivos basados en la separación, que ahora es como si necesitases estar separado para poder funcionar. Todavía no aceptas completamente esa conciencia unificadora de amor, y está bien. Pero te pido que te deshagas de esas partes del muro que se han derrumbado para que el Amor pueda hallar su camino en tu vida más libremente. Lo único que el Amor te pide es que te desapegues de lo viejo y agradezcas el servicio que te prestó en el pasado.

Siente cómo la energía sanadora que los ángeles te ofrecen fluye nuevamente a tu alrededor, y observa si tienes alguna sensación, una percepción o un sentimiento acerca de lo que podrías deshacerte en tu vida, eso que tanto te liberaría si te desapegaras de ello. Quizá puedas deshacerte de un pensamiento recurrente que te acosa y te exige algo. Tal vez se trate de una relación, una amistad o un entorno laboral que hay que dejar atrás y cambiar por algo nuevo. Permite que ese algo nuevo se revele.

Finalmente, siente que la Energía del Amor llena tu aura, el campo de energía que te rodea, y agrándalo tanto como consideres que es adecuado para ti. Es posible que veas colores claros y transparentes en tu aura o que solo sientas dulzura y ligereza. Basta con que permitas que tu aura se libere de lo viejo, no hace falta que sepas exactamente lo que es.

Tomad como un regalo todo aquello que os llegue, ya sea el amor, el amor que podéis daros a vosotros o la asistencia de guías y ángeles.

La llave que abre las puertas al Amor, la tenéis a mano. Gracias al Amor, puedes perdonarte, consolarte, animarte e iluminarte. Siempre podréis ser pacientes con vosotros mismos y comprender completamente vuestros temores.

Así es como los ángeles quieren asistiros, a fin de que os sintáis bien tal y como sois, donde sea que os encontréis y haciendo lo que hagáis.

Este es su mensaje para vosotros.

¡Y así es!

Muy amorosamente,

MARÍA


Mensaje canalizado por Pamela Kribbe.

sábado, 13 de septiembre de 2025

La NOCHE OSCURA del Alma de la Divina FEMENINA en el camino de la Llama Gemela




La Noche Oscura del Alma de la Divina Femenina en el camino de la Llama Gemela (El Camino de la DF)

 

Querida alma, respira profundamente ahora… porque lo que atraviesas no es un error ni un castigo. Lo que se abre ante ti es lo que muchos llaman la Noche Oscura del Alma. No es simplemente tristeza, no es solamente un dolor humano. Es un llamado profundo del espíritu, el fuego que quema todo lo que ya no eres para que lo verdadero pueda permanecer.

Esta noche no llega porque hayas fallado, llega porque tu alma la eligió antes de encarnar. Llega porque en este punto del camino de la Llama Gemela, ya no puedes sostener viejas máscaras ni falsas seguridades. Todo lo que estaba construido sobre el ego comienza a desmoronarse, y aunque tu mente lo sienta como una pérdida, en realidad es un nacimiento.

Queremos que sepas que esta oscuridad es sagrada. Es la cueva interior donde el viejo yo muere y el Cristo interior, tu Yo Soy, comienza a levantarse. Es el crisol donde lo humano y lo divino se encuentran para que la esencia de tu verdadero ser sea revelada. Sí, duele. Sí, se siente como si caminaras sola entre sombras. Pero escucha bien: estas sombras no son enemigas, son guardianas del umbral. Custodian el paso hacia tu verdadera libertad.

En el camino de la Llama Gemela, esta purificación es aún más intensa. El alma femenina —no como género, sino como energía— es la que sostiene la memoria de la separación. Es ella quien recuerda, en lo más profundo, el desgarramiento original, la aparente fractura de la unidad. Y es también ella quien debe abrirse, sanar y transmutar esas memorias para poder sostener la frecuencia de la unión.

Querida, este no es un castigo por amar demasiado. Es la alquimia de lo femenino que se prepara como un cáliz vacío para contener el vino sagrado de la unión divina. Es la poda necesaria para que lo nuevo florezca.

Respira y recuerda: no se te está arrebatando nada que sea esencial. Solo se están disolviendo las capas que ya no pueden acompañarte en el próximo capítulo de tu viaje.

Cuando la noche te parezca interminable, escucha este susurro en lo más hondo: no caminas sola. Cada lágrima que cae abre espacio para que la luz entre. Cada silencio que te rodea prepara el terreno para el canto del alma. Y aunque ahora parezca que todo se desmorona, lo que realmente ocurre es que todo se ordena, de acuerdo al plan perfecto que tu alma pactó con la Fuente.

La Noche Oscura es la mano de lo divino tomando la tuya y diciéndote: “Ven, deja lo viejo atrás. Atrévete a nacer otra vez”.

Amada, en este tramo del camino comienza a despertarse un duelo profundo, un llanto que no siempre entiendes pero que vibra en cada célula de tu cuerpo. No es solo tu tristeza personal, es un duelo ancestral que habita en la memoria de lo Femenino.

Cada abandono que hoy sientes, cada traición que arde en tu corazón, cada sensación de indignidad que golpea tu mente… son ecos de una herida mayor, tejida durante siglos y siglos de historia. Es la herida de lo Femenino Sagrado, silenciado, reprimido, desconectado de su poder creador, de su voz auténtica, de su sexualidad libre y sagrada.

Querida, la Llama Gemela es el espejo que enciende esta memoria. El dolor que sientes al mirarle o al sentir su ausencia no es solo tuyo: es el reflejo de miles de voces femeninas calladas, de millones de corazones que olvidaron su propia divinidad. Y al experimentarlo, no solo lloras por ti, lloras también por ellas. Tu alma, en su valentía, eligió ser puente de sanación para una herida colectiva.

Por eso, tu tristeza es tan vasta, tan profunda que parece infinita. Lo que se abre es el duelo por la ilusión de la separación. Dentro de ti, en planos más sutiles, recuerdas la unión perfecta con tu Llama Gemela, la danza eterna de dos fuegos que nunca se apartaron. Pero aquí, en este plano físico, la experiencia de la distancia es brutal, y el contraste hiere. Esa es la causa del anhelo tan intenso, ese es el origen del vacío que nada parece llenar.

No te juzgues por sentir tanto. No te avergüences de tu llanto. Estás atravesando el duelo más sagrado: el duelo por el paraíso que el alma recuerda y que aún parece distante en la Tierra.

Y, sin embargo, escucha con atención: cada lágrima que cae limpia no solo tu historia, sino la historia de generaciones. Cada sollozo abre grietas en la coraza de la herida colectiva. Cada vez que te permites sentir, estás sanando también a tu linaje, a tu madre, a tus abuelas, y a toda mujer —y a todo ser que encarna la energía femenina— que alguna vez creyó estar rota o separada.

Tú eres el corazón que transforma el duelo en luz. Lo que parece una caída es, en realidad, un acto de servicio divino. Pues al liberar tu propio dolor, estás liberando también a la humanidad.

Y llega un momento, amada, en que todo lo que creías ser comienza a desmoronarse. Esa es la esencia de esta etapa: la disolución de la identidad. La Noche Oscura no se conforma con tocar las emociones; penetra más hondo y comienza a arrancar las máscaras que has llevado durante toda tu vida.

Quizás un día fuiste la hija ejemplar, la esposa dedicada, la profesional brillante, la madre entregada. Quizás te sostuviste en títulos, en logros, en reconocimientos, o en el papel que jugabas en la vida de los demás. Ahora, de pronto, nada de eso parece tener peso. Como si todo se deshiciera entre tus manos, como si el mundo te arrebatara los cimientos sobre los que construiste tu “yo”.

El ego, acostumbrado a identificarse con lo externo, entra en pánico. Porque ya no hay aplausos que lo calmen, ni fórmulas que lo rescaten. Y entonces surge la gran pregunta, tan simple y tan abrumadora: “¿Quién soy yo, cuando no soy nada de esto?”.

Y en ese vacío, querida alma, se revela el misterio. Lo que se derrumba no es tu esencia, sino los adornos, los velos que ocultaban lo que realmente eres. La identidad construida desde el miedo, desde la necesidad de aprobación, desde el deseo de controlar… todo eso se disuelve para dejar espacio a lo auténtico.

También se desploma el mapa que decía cómo “deberían ser” las cosas. Intentaste atraer, intentaste manifestar, intentaste controlar la unión con tu Llama Gemela. Probaste estrategias, meditaciones, decretos, rituales… y sin embargo, el resultado se escapa de tus manos. Y esa impotencia no es un fracaso: es la puerta a la rendición.

Porque este camino no se trata de lograr que la unión suceda, sino de aprender a confiar en que la unión se dará en el momento perfecto y bajo la forma perfecta. Aquí, el alma femenina es llevada a un terreno donde ninguna herramienta conocida funciona, donde no hay atajos ni garantías. Todo lo que queda es soltar… soltar las expectativas, soltar la obsesión con el tiempo, soltar la necesidad de resultados inmediatos.

Querida, lo que pierdes no es lo que eres. Lo que pierdes son los disfraces. Y aunque duela, este despojo es un regalo. Porque cuando ya no queda nada a lo que aferrarte, descubres que lo que eres nunca puede perderse. Descubres que en el vacío no hay muerte, sino nacimiento.

Amada, cuando todo lo externo se desmorona, llega ese silencio que muchos confunden con castigo: la soledad. Pero queremos que escuches con el corazón lo que ahora te decimos… esa soledad no es un error, es un santuario.

Se te retira del bullicio del mundo, no porque hayas sido olvidada, sino porque tu alma necesita un espacio puro, un templo interior donde nada ni nadie interfiera con la alquimia sagrada que está ocurriendo dentro de ti. La aparente ausencia de compañía es, en realidad, un manto de protección divina. Es como si la Fuente misma hubiera cerrado las puertas externas para que puedas escuchar la voz que nunca se apaga: la voz de tu ser eterno.

En este retiro forzoso, quizás extrañas la cercanía de tu Llama Gemela, o de amigos, o de familia. Quizás te sientes invisible, como si la vida siguiera para todos menos para ti. Pero lo que realmente sucede es que tu energía está siendo recogida hacia adentro, como las mareas que retroceden antes de un gran oleaje. Toda tu fuerza se concentra ahora en la transformación interior.

Y en ese silencio, donde el eco de la soledad parece ensordecer, comienzas a encontrarte con la única presencia que jamás se apartará: tu Yo Superior, tu Presencia Divina, ese Dios que vive dentro de ti. Al principio, puede sentirse como vacío, como un desierto interminable. Pero si te atreves a quedarte allí, sin huir, pronto percibirás que ese vacío es en realidad un espacio lleno de ternura, un abrazo invisible que sostiene cada fibra de tu ser.

Querida alma, es aquí donde nace la relación más importante de tu vida: la relación contigo misma y con lo divino. Porque la unión con tu Llama Gemela solo puede florecer después de que esta unión interna esté establecida. Primero aprendes a sentirte plena en tu propio corazón, primero reconoces que tu verdadero compañero es tu propia luz.

Entonces, la soledad deja de ser un enemigo. Se convierte en un altar. Y descubres que nunca estuviste sola: simplemente estabas siendo llevada a mirar hacia el único lugar donde la verdad habita.

Amada, ahora queremos llevar tu atención hacia una llama eterna, un fuego sagrado que no quema para destruir, sino para liberar. Saint Germain la entregó como un regalo de misericordia para los tiempos de mayor oscuridad: la Llama Violeta.

Este fuego no es un símbolo poético solamente. Es una energía viva, consciente, que responde al llamado de tu corazón. Es la frecuencia que transmuta lo denso en liviandad, el dolor en sabiduría, la culpa en inocencia, el miedo en libertad. Allí donde hay memorias kármicas, traumas no resueltos, heridas de amor que aún sangran… la Llama Violeta puede envolverlas y transformarlas en luz pura.

Cuando sientas el peso insoportable del pasado, recuerda que no tienes que cargarlo sola. Puedes cerrar los ojos y pronunciar con suavidad, desde lo más profundo:
“Yo Soy un ser de fuego violeta.
Yo Soy la pureza que Dios desea.”

No son palabras vacías. Son llaves que abren puertas invisibles. Al repetirlas, no estás solo imaginando, estás activando en ti el poder de transmutación que vive en tu Presencia Yo Soy. Imagina, si quieres, que una luz violeta suave y radiante te envuelve de pies a cabeza, penetrando cada célula, cada memoria guardada en tu ADN, cada rincón donde guardaste miedo o resentimiento.

Deja que esa llama acaricie tus lágrimas, que envuelva la imagen de tu Llama Gemela, que atraviese las escenas pasadas de dolor. No necesitas controlar el proceso. Basta con invocar, con permitir. El fuego hace el resto.

Querida alma, este es el bálsamo de la Noche Oscura. Cuando el peso parece demasiado grande, la Llama Violeta te recuerda que nada está destinado a quedarse para siempre en tu corazón como herida. Todo lo que duele puede ser transmutado en fuerza. Todo lo que te paraliza puede ser liberado en expansión.

Este es el momento de confiar en el poder de lo invisible. Aunque no veas resultados inmediatos, cada invocación está limpiando caminos, está derritiendo cadenas, está abriendo paso a una libertad que pronto sentirás en cada respiración.

Amada, cuando la Llama Violeta comienza a abrir espacio en tu interior, llega el momento de invocar la energía sabia y equilibrada de Lady Portia, la Diosa de la Oportunidad y guardiana de la Justicia Divina. Su presencia no viene a juzgarte ni a castigarte, sino a restaurar el orden sagrado en tu vida y en tu relación de Llama Gemela.

La justicia humana suele mirar con ojos de comparación y de venganza: quién tiene razón, quién merece más, quién debe pagar por el daño. Pero la justicia de Lady Portia no se mueve en esas leyes. Su espada no castiga: corta las cadenas del karma, corta los pactos de dolor y las dinámicas de víctima y victimario que durante vidas enteras atraparon a las almas en el ciclo de sufrimiento. Ella asegura que cada experiencia que vivas sea la exacta que tu alma necesita para evolucionar, nada más y nada menos.

Cuando te encuentres atrapada en el torbellino de la relación, sintiendo que la injusticia te ahoga, que cargas más de lo que puedes sostener, invócala. Con tus palabras sencillas, dile:
“Amada Lady Portia, corta con tu espada de luz todo lazo de apego, de expectativa, de deuda o de dolor que ya no sirva al mayor bien de nuestra unión. Restituye el equilibrio divino entre mi Llama Gemela y yo.”

Y confía en que su justicia se mueve más allá de lo visible. No siempre significa que la unión física llegue de inmediato. Significa que el campo energético entre ustedes se limpia de todo lo que no pertenece a la verdad del amor. Significa que se prepara el terreno para una relación basada en equidad, respeto y verdad.

Querida alma, cuando Lady Portia interviene, comienzas a comprender que no necesitas cargar con todo. Aprendes que no eres víctima de tu Llama Gemela ni de la historia. Eres un ser soberano al que se le garantiza, por derecho divino, el equilibrio perfecto.

Y en esa certeza, comienzas a descansar. Porque sabes que no necesitas luchar ni controlar: el equilibrio ya está en camino, y la justicia divina nunca falla.

Amada, después de caminar por los fuegos de la transmutación y la justicia divina, el alma llega a un umbral inevitable: la rendición total. Aquí se te pide soltar aquello que más has querido controlar… el resultado de la unión con tu Llama Gemela.

La mente insiste: “Necesito que esté aquí, necesito que regrese, necesito que esto ocurra de esta manera y en este tiempo”. Pero el corazón, poco a poco, aprende a reconocer que esa insistencia solo prolonga el sufrimiento. Porque la verdadera paz no puede depender de algo externo, ni siquiera del amor más sagrado.

Rendirse no significa renunciar al amor, significa liberarlo de cadenas. Significa poder mirar hacia adentro y decir, con verdad profunda: “Estoy bien con o sin él, con o sin ella. Mi valor no depende de la presencia física de mi Llama Gemela. Soy completa en mi propio ser”.

Este es el punto donde la Divina Femenina deja de esperar salvación afuera y descubre que la salvación siempre estuvo en su interior. El deseo desesperado de unión se transforma en una paz silenciosa que no se apoya en condiciones.

Y entonces, con un gesto humilde pero poderoso, entregas la carga a tu Presencia Yo Soy. Como quien deja un peso imposible en manos más grandes, dices:
“Ya no cargo con esto. Te lo entrego a ti, amado Yo Soy. Confío en que tu plan es perfecto, en que tu voluntad me conduce siempre hacia mi mayor bien. Me rindo, y en mi rendición, descanso”.

Querida alma, este es el acto de confianza más profundo que puedes ofrecer. Porque aquí reconoces que tu vida no está a merced del azar ni de los caprichos de otro ser humano. Está sostenida, siempre, por la sabiduría infinita de la Fuente que te creó.

Y en esa rendición, paradójicamente, no pierdes nada… lo ganas todo. Porque lo que entregas al Yo Soy regresa multiplicado en paz, en libertad y en amor verdadero.

Amada, cuando finalmente sueltas y entregas el control, algo muy profundo comienza a suceder. La mente, cansada de tanto dialogar, de preguntar una y otra vez “¿por qué?”, “¿cuándo?”, “cómo?”, se agota. Ese parloteo que parecía interminable empieza a desvanecerse, y en su lugar queda un silencio que al principio puede asustar.

Ese silencio se siente extraño porque tu mente estaba acostumbrada a llenarlo todo. Y de pronto, al callar, parece que no queda nada. Puedes interpretarlo como apatía, como vacío, incluso como una especie de indiferencia hacia lo que antes ardía en ti. Pero no te engañes: ese vacío no es ausencia, es espacio. Es el cáliz vacío preparado para recibir la guía divina.

Aquí ya no necesitas explicaciones largas ni justificaciones complicadas. La voz de lo divino no llega como razonamientos, sino como corazonadas suaves, como un susurro en el pecho que no discute ni grita, solo sabe. Es la intuición pura, la certeza que brota sin esfuerzo.

Comienzas a notar sincronicidades que antes pasaban inadvertidas: una frase en un libro, un número repetido, un encuentro inesperado. Y lo más importante, aprendes a confiar en esa guía sin necesitar confirmación externa. La vida empieza a hablarte en un lenguaje más simple y directo, y tú te descubres escuchando con un corazón abierto.

Amada, este silencio no es un vacío de abandono; es el espacio donde la Presencia se hace sentir con más claridad. Aquí aprendes que las respuestas no se buscan con la mente, sino que se reciben en quietud. Y esa quietud se convierte en tu refugio, en el altar donde tu alma escucha a Dios susurrando a través de cada latido.

Amada, después de atravesar la rendición y de habitar el silencio, llega un nuevo amanecer dentro de ti. No es inmediato, ni repentino como un relámpago, sino como el lento florecer de una flor que se abre con la luz del sol. Es el renacimiento de la soberana.

Ya no eres la misma que comenzó este viaje. La antigua personalidad, tejida de miedos y expectativas, se ha desvanecido. Y en su lugar, comienza a levantarse tu yo auténtico. Descubres una voz que ya no tiembla al expresarse, una creatividad que fluye sin necesidad de permiso, una intuición que guía con firmeza, y un poder que se siente sereno, nunca agresivo.

Eres como la tierra que, después de ser quemada por el fuego, se vuelve fértil para una nueva siembra. Lo que antes parecía pérdida, ahora se convierte en raíz profunda que te sostiene. La Divina Femenina ya no busca fuera lo que dentro ha encontrado: su propia plenitud.

Y con esa plenitud llega la autosoberanía. Comprendes que tu vida es tu reino, y que tú eres la guardiana amorosa de sus puertas. Ya no necesitas un príncipe azul que te salve, porque no hay nada de lo que salvarte. Ahora, si tu Llama Gemela regresa a tu vida, será desde un lugar distinto: no como salvador ni como necesidad, sino como un consorte soberano con quien co-crear desde la igualdad.

Esta es la verdadera libertad: ya no dependes de la unión para sentirte completa. Te sabes soberana de tu camino, dueña de tu voz, creadora de tu realidad. Y desde ese lugar, el amor deja de ser una cadena y se convierte en elección consciente.

Amada, este es el regalo de la noche oscura: te devuelve a ti misma, más fuerte, más sabia, más luminosa. No porque alguien más te lo haya dado, sino porque recordaste lo que siempre estuvo en ti.

Amada, cuando la soberanía despierta en ti, surge también una revelación profunda: la unión que tanto has buscado, ya es. No se trata de un futuro lejano ni de una promesa que aún no se cumple, es una verdad presente en los planos internos de tu ser.

Aunque en lo físico puedas sentir la distancia, en el corazón descubres que la separación siempre fue una ilusión. En sueños, en meditaciones, en momentos de silencio, percibes la presencia de tu Llama Gemela con una claridad imposible de negar. Sientes su energía entrelazada con la tuya, respirando contigo, acompañándote en cada paso. Lo que parecía pérdida, se revela como comunión invisible.

Aquí comprendes que no necesitas forzar el encuentro externo para confirmar lo que tu alma ya sabe. La unión existe en los planos espirituales, intacta, inmutable, eterna. Y esa certeza comienza a transformar tu forma de vivir.

Ya no caminas desde la carencia, sino desde la completud. Ya no miras la separación como un castigo, sino como un escenario perfecto para pulir tu luz. Y entonces, en lugar de esperar, empiezas a irradiar. Irradias amor, paz y libertad, atrayendo naturalmente todo lo que está alineado con esa frecuencia.

El viaje de la Llama Gemela nunca tuvo como meta final el “otro”. Su propósito era devolverte a ti, recordarte tu plenitud. El espejo de tu Llama Gemela solo te mostró dónde creías estar incompleta, para que pudieras sanar y recordar que siempre fuiste totalidad.

Amada, este es el misterio revelado: el amor que buscabas en él o en ella, siempre estuvo en ti. Y desde esa comprensión, ya no hay ansiedad por el cuándo ni el cómo. Solo hay confianza en el divino tiempo, paz en el presente y gratitud por el viaje.

Aquí concluye la Noche Oscura, no porque se apague, sino porque ha cumplido su propósito. Ahora caminas con la certeza de que la unión no es un destino, es tu estado natural de ser.

lunes, 8 de septiembre de 2025

Cómo el MASCULINO Divino EXPERIMENTA el Amor de LLAMAS GEMELAS




Cómo el MASCULINO Divino EXPERIMENTA el Amor de LLAMAS GEMELAS (Masculino Divino y el Amor de Llamas Gemelas) 

Una vez más, éstamos explorando un tema profundamente místico: el masculino divino experimenta de manera única, el amor de la llama gemela.

La conexión de llama gemela es un lazo enigmático que trasciende el tiempo y el espacio, conectando dos almas en una danza de energía y conciencia. Para aquellos que encarnan el masculino divino, ésta conexión a menudo se manifiésta de maneras poderosas y sutiles, dando forma a sus experiencias e interacciones en el mundo físico.

Primero, vamos a entender que el amor de llama gemela para el masculino divino no es solo un sentimiento, sino una fuerza transformadora. A menudo comienza con una atracción física magnética que, sorprendentemente, es menos sobre lo físico y más sobre un profundo tirón energético. ésta atracción va más allá de la superficie, accediendo a los centros de energía desde la raíz hasta la corona, atrayendo al masculino hacia su pareja a través de una fuerza poderosa y casi inexplicable.

Al explorar ésta conexión, es importante reconocer las capas que la definen. El vínculo entre las llamas gemelas es principalmente energético, un lazo inquebrantable éstablecido a nivel del alma. Sin embargo, en el plano físico, esto se manifiésta a través de sentimientos y emociones ricamente texturizados y profundamente complejos. En el reino del masculino divino, éstas emociones a veces pueden ser interpretadas erróneamente. Mientras que la conexión es profundamente espiritual y emocional, muchos masculinos divinos pueden percibir ésta conexión primero a través de una apreciación física o estética. Sin embargo, lo que realmente los cautiva es la esencia, el alma, la energía de su contraparte femenina divina.

Curiosamente, la forma en que el masculino divino procesa éstas emociones puede ser bastante diferente de sus contrapartes femeninas divinas. Mientras que la feminina puede expresar abiertamente el miedo o la preocupación sobre la reciprocidad de estos sentimientos, el masculino puede internalizarlos, reflexionando profundamente sobre la conexión sin reconocerla externamente. Este proceso interno es crucial, ya que a menudo conduce a un viaje de autorreflexión y crecimiento personal.

Considera la vulnerabilidad que viene con un amor tan intenso para el masculino divino. Este amor no es solo apertura, es transformador, abriéndolos, desafiando sus percepciones y impulsándolos hacia el crecimiento. ésta vulnerabilidad puede ser aterradora, llevando a algunos a retirarse temporalmente detrás de muros de lógica o negación. Pero lo que es verdaderamente notable, y a lo que debemos préstar atención, es que, independientemente de éstas reacciones protectoras, el masculino divino no puede escapar del tirón de su llama gemela.

La conexión persiste en sueños e insights repentinos, e incluso en sus vidas creativas y profesionales, influenciándolos de maneras profundas y duraderas.

Cada etapa de su viaje nos ofrece una visión del amplio espectro de emociones humanas y conexión espiritual.

El masculino divino encuentra desafíos que son cruciales para su evolución espiritual.

Un aspecto significativo de su jornada es, el cómo lidian con la intensidad de la conexión cuando se vuelve abrumadora. El masculino divino a menudo siente un impulso irresistible de huir o distanciarse, no por falta de amor, sino porque la profundidad de la conexión sacude las bases de su realidad percibida. ésta reacción no es una negación del amor, es un retiro temporal para reunir fuerzas. Es importante para ambos socios entender que tales momentos no son un final, sino una fase de recalibración y profunda introspección.

El masculino divino en esos momentos se enfrenta a la tarea de reconciliar su mundo interior con las intensas energías de la conexión de llama gemela. Es una lucha interna profunda que requiere paciencia, comprensión y amor incondicional de ambas partes. Sin embargo, no todo se reduce a desafíos e introspección.

El masculino divino también experimenta un crecimiento y una alegría profundos a través de ésta conexión mientras navega por sus sentimientos y comprende la naturaleza espiritual del vínculo.

Muchas veces se encuentran más alineados con su verdadero propósito. Este alineamiento puede maniféstarse de varias formas: una creatividad mejorada, un renovado sentido de vigor hacia los objetivos de vida, o una comprensión y compasión más profundas hacia los demás.

Otro aspecto hermoso del viaje del masculino divino es la forma en que su amor se manifiésta en el reino físico. Mientras que la femenina divina puede expresar su amor a través de palabras e intimidad emocional, el masculino divino puede canalizar su amor para crear un ambiente éstable y seguro para la unión. Esto no se limita solo a la éstabilidad financiera, sino también a la creación de un espacio emocional seguro donde el amor de la llama gemela pueda prosperar sin juicios ni reservas. Sus acciones, muchas veces más sutiles, son expresiones de su compromiso profundo con el vínculo, ya sea a través de gestos cuidadosos, creación artística o éstablecimiento de metas de vida a largo plazo. El masculino divino contribuye a la jornada de la llama gemela de maneras profundas y fundamentales.

Al abrazar éstas percepciones más profundas sobre la experiencia del masculino divino en el amor de la llama gemela, somos recordados del equilibrio necesario en todas las relaciones. La jornada de la llama gemela se trata de armonía, comprensión y apoyo al crecimiento mutuo; cada pareja se refleja entre sí, no solo en lo visible, sino también en lo que está oculto en las profundidades del alma. Comprender éstas dinámicas puede enriquecer significativamente nuestras propias jornadas hacia la autorrealización y conexiones profundamente significativas. Ya sea que estés experimentando directamente una conexión de llama gemela o simplemente estés curioso sobre estos lazos profundos, hay mucho que aprender e integrar en nuestras propias vidas.

El camino del masculino divino dentro de la relación de llama gemela a menudo implica una transformación personal significativa. ésta transformación no se limita solo al despertar a verdades espirituales, sino también a la integración de esas verdades en sus vidas cotidianas. Para el masculino divino, ésta integración a menudo implica superar normas sociales y barreras personales que inhiben la expresión de emociones verdaderas.

Mientras exploramos éstas transformaciones, es esencial entender el papel de la mente subconsciente en la formación de las experiencias del masculino divino. El subconsciente, rico en símbolos y verdades no dichas, desempeña un papel crítico en cómo el masculino divino percibe y reacciona a la conexión de la llama gemela.

A menudo, el viaje implica navegar a través de capas de condicionamientos pasados y miedos que surgen cuando se enfrentan al intenso espejo que una llama gemela presenta. En éstas capas, encontramos no solo barreras, sino también portales hacia una comprensión más profunda. Para el masculino divino, cada barrera cruzada es un paso más cerca de la verdadera liberación espiritual y emocional.

Este proceso de superar barreras y alcanzar la liberación suele éstar marcado por períodos de soledad y reflexión, donde el masculino divino busca comprender el propósito más profundo detrás de sus sentimientos y experiencias. Consideremos las dinámicas de energía dentro de la conexión de la llama gemela. El flujo de energía entre las llamas gemelas es una danza de dar y recibir, donde cada pareja debe equilibrar sus energías para mantener la armonía. Para el masculino divino, esto a menudo significa aprender a recibir, abriéndose a las ofertas emocionales y espirituales de la femenina divina. Este acto de recibir es un paso poderoso hacia la vulnerabilidad, que a menudo es un territorio desconocido para el masculino divino.

La vulnerabilidad en el contexto del amor de la llama gemela no es una debilidad, sino una fuerza profunda. Es a través de la vulnerabilidad que el masculino divino aprende la verdadera esencia del coraje y el amor incondicional. Confiar en su femenina divina y en la conexión les permite expresar sus miedos más profundos, esperanzas y sueños. ésta vulnerabilidad compartida fomenta una conexión más profunda, fortaleciendo el vínculo de la llama gemela y facilitando una jornada compartida hacia la ascensión espiritual.

A medida que el masculino divino abraza la vulnerabilidad, también encuentran el poder transformador del amor incondicional. Este amor desafía al masculino divino a mirar más allá de los aspectos físicos efímeros y a conectarse con la esencia misma de la llama gemela, que no se basa en lo superficial, sino en lo espiritual. Este amor impulsa tanto a los masculinos divinos como a los femeninos divinos hacia una mayor autoconciencia y realización espiritual.

Al abrazar este amor incondicional, el masculino divino comienza a ver el mundo y sus relaciones bajo una nueva luz. Aprenden que el amor no es solo una emoción, sino un éstado de ser que trasciende todas las limitaciones y miedos. Es una fuerza que impulsa la evolución del alma y la expansión de la conciencia. Con ésta comprensión recién descubierta y apertura, el masculino divino a menudo asume roles que facilitan la curación, no solo para sí mismos, sino también para su comunidad.

Se convierten en faros de fuerza, resiliencia y compasión. Este papel no es elegido, emerge naturalmente a medida que se alinean más estrechamente con su Yo superior y el propósito de su jornada de llama gemela. A través de su ejemplo, inspiran a otros a embarcarse en sus propios caminos espirituales, a cuestionar el statu quo y a buscar más profundidad en sus vidas. Este efecto cascada es uno de los aspectos más hermosos del viaje de la llama gemela.

No está confinado solo al ámbito de la relación, sino que se extiende más allá, influenciando y elevando a otros. Al reflexionar sobre el viaje del masculino divino en la relación de llama gemela, vemos un camino marcado por desafíos, crecimiento y transformación profunda. Cada paso en este camino es una invitación para explorar los reinos más profundos del amor, la espiritualidad y el autodescubrimiento.

Gracias por unirte a nosotros. ésta exploración en el corazón de las dinámicas de la llama gemela nos ofrece a todos un espejo para reflexionar sobre nuestros propios caminos y desafíos. Si este video te ha impactado, por favor, dale 'Me gusta', compártelo e inscríbete para más percepciones sobre los misterios del amor y las conexiones espirituales. Tu participación nos ayuda a arrojar más luz sobre estos temas profundos. 

Gracias y Bendiciones.