Maestro Hilarion
Mensaje Semanal
Marzo 2 al 9 de 2014
Marzo 2 al 9 de 2014
Amados:
Es importante
conectaros con vuestro propio corazón y seguir su consejo; y recordar que en el
momento presente algunas personas van a pasar por experiencias que requieren
vuestra empatía, compasión y comprensión, mientras se enfrentan con sus
sentimientos a su propia manera. Recordad el Amor que yace en el núcleo de su
Ser y en el vuestro; y tan sólo permitid que se exprese como quiera.
Algunos cambios que
ocurren en las vidas de las personas crean una revaluación total de cómo ven su
vida; y éste puede ser un proceso difícil de experimentar. En el núcleo de
todos los desafíos de la vida hay una lección de aceptación de que no todo
puede permanecer igual; y que suceden eventos que dejan un vacío que nada puede
llenar. Solamente el paso del tiempo sana estas comprobaciones.
El Amor en sus muchas
facetas de expresión es una fuerza muy potente; y puede sanar incluso las
expectativas más cínicas. Cuando el corazón de una persona tiene
predominantemente Amor, el mundo conspira para traerle experiencias que
reflejan ese Amor. Permitir que el propio corazón permanezca abierto durante
tiempos de aflicción y tristeza, ayuda en el proceso de sanación de cada individuo.
Frecuentemente estas
expresiones provienen de las heridas en la psique de una persona; y esto
permite que la persona entre y examine estos sentimientos con mayor enfoque que
el que habría tenido de otra manera. Eso le ayuda a crecer y expandir su comprensión
de sí misma y de otros en su entorno, de tal manera que entiende que cada
persona tiene eventos similares en su propia vida que ayudan a conformarla como
una expresión más abierta y amorosa de los atributos del Creador.
Con fundamento en el
Amor, cualquier cosa y todas las cosas pueden superarse. A la vida de cada
persona llegan muchos eventos y circunstancias que su Alma ha elegido
experimentar para alinear esas áreas de su propia personalidad con los aspectos
superiores de la expresión Humana. Esto le ayuda a conectarse con un poder más
grande del que su Yo Humano pueda percibir; y así es como comienza a entender
que en su vida individual está trabajando una fuerza mayor que la que
previamente había supuesto.
Así es como la
cualidad de la fe comienza a crecer y expandirse en su consciencia. Este
despertar del conocimiento de un poder superior activo en su vida, da al
individuo la capacidad de soportar muchas pruebas y tribulaciones de la vida; y
lo imbuye con una fortaleza interna que nunca perderá, sin importar los eventos
que lleguen.
Con cada experiencia
vital, cada individuo obtiene un importante valor que se convierte en parte de
su repertorio de las habilidades y herramientas que utiliza en su vida cuando
es necesario. Solamente por medio de la propia experiencia uno puede sentir
empatía y Unicidad con otro.
Es por medio de este
proceso como tiene lugar la unidad entre todos los seres. Cuando uno se
entrega, también está el proceso que viene del Amor y el cuidado, que trae
sanación y liberación de las auto-recriminaciones, la culpa, la vergüenza; y
otros sentimientos que uno ha estado manteniendo en un estado vibratorio
inferior; y esto puede liberar al individuo para avanzar en su vida a partir de
un simbólico nuevo comienzo.
Cada vida vivida en la Tierra tiene gran valor; y
quienes abandonan este plano de existencia dejan una profunda impronta en
quienes estaban en su esfera de influencia. Quienes se quedan deben buscar el
don que les fue dado por su Ser Amado en sus interacciones y asociaciones con
él. Algunas veces, quienes se quedan solamente pueden reconocer estos regalos
con el paso del tiempo y de la experiencia.
Cada experiencia es
utilizada por su Alma eterna para obtener sabiduría y expansión, como parte de
sus cualidades álmicas. Éste ha sido el propósito de la vida en un Mundo de
dualidad, donde las Almas pueden experimentar la polaridad de fuerzas opuestas;
y aún así pueden recordar ese núcleo esencial de Amor y Luz en su interior.
Hasta la próxima
semana...
YO SOY Hilarion.
Canalizado por Marlene
Swetlishoff
Tradujo: Jairo Rodríguez R.
Tradujo: Jairo Rodríguez R.
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