ATENAS.
La amabilidad y la gratitud:
Piedras angulares del proceso de ascensión.
1 de junio del 2012.
La amabilidad y la gratitud:
Piedras angulares del proceso de ascensión.
1 de junio del 2012.
Queridos niños, vengo a ustedes con un
corazón rebosando de amor y buenos deseos en esta soleada mañana. Es soleada y
abundante pues estamos más cerca que nunca de la realización de nuestro sueño.
Sí, nuestro sueño, suyo y mío y el de las Legiones de los Reinos Celestiales.
Así que, denme el gusto, si lo desean
mis queridos, en mis gozosas divagaciones, ¡pues yo tengo en mente traer
una agradable nota en junio!
Mi mensaje es bastante breve y simple, y
no me expandiré ni adornaré. Sin embargo, me gustaría que mis palabras
sirvieran como un posible primer paso para el nuevo despertar y como un muy
necesitado recordatorio a nuestros guerreros más experimentados.
Ha llegado a mi atención y a la atención
de muchos en la compañía de que es tiempo para un recordatorio del más
fundamental principio de lo que es el proceso de ascensión verdaderamente.
Lo que involucra. Es lo más normal y esperado de uno personificado en la
forma humana querer disertar y estudiar todo hasta la más diminuta partícula.
Esto resulta con frecuencia en que se
hace una situación o concepto mucho más complicado de lo que necesita ser. Y
esto es así también con el tópico de la ascensión.
Esto no es algo complejo en absoluto,
sino que, más bien no hay nada que ustedes deban encarar en esta vida o en
cualquier otra que sea más simple y más fácil de entender. No se trata de
entender conceptos difíciles de la historia del planeta, de la física cuántica
o la geometría sagrada; aunque el conocimiento de estos sea loable y hermoso.
No se trata de suplicar lagrimosamente a
sus hermanos y hermanas de las estrellas que los eleven en un haz de luz y los
transporten lejos. No se trata de escaparse en absoluto. Ni tampoco de ponerse
en un pedestal, o actuar con superioridad o dominantemente sobre quienes siguen
aferrándose a los viejos ideales.
No se trata de derrocar a gobiernos y
finanzas, revelaciones o arrestos, ni siquiera del castigo de aquellos que
ustedes sienten les han hecho daño a ustedes o a la sociedad en
conjunto.
No
se regocijen de la mala fortuna de otro, pues ése no es el Camino del
Cristo.
Ah, nunca cuestionen el que ellos
tendrán que responder al Padre, pues esos asuntos serán abordados y
rectificados en buen tiempo. Recuerden no dirigirse a ellos desde un punto de
vista de juzgar o de criticar y buscar retribución, sino con compasión, oraciones
para la restauración y con el espíritu de Su corazón que perdona.
La ascensión se trata del corazón. Sí,
el corazón. Eso es todo. Cuando viven de corazón, todo lo demás encajará en su
lugar. El ascender es elevar la vibración de uno. Y para elevar su vibración
deben comer, dormir respirar a partir de la esencia del núcleo mismo del
corazón.
Deben
tanto personificar como emanar la gracia de la Madre Santa.
Deben andar por la Tierra como Sananda
lo hizo, como la Magdalena lo hizo. En un estado de generosidad y bondad. Como
uno que no juzga a otro, sino que ofrece una mano de ayuda para guiarlo hacia
la Luz, en un tiempo cuando están cayendo presa de la oscuridad. Deben ser la
amabilidad personificada.
No existe oportunidad mejor alguna para
ustedes ahora que la expansión de su amoroso corazón. El crecimiento no puede
ocurrir en ningún otro lado, no duden de que esto sea así. El conocimiento los
llevará lejos, pero la pureza de la intención los llevará más lejos.
Cultiven una amorosa vibración y conducta
y vívanla, séanla diariamente. Es abrazando y luego expresando las cualidades
de la vida en la 5a. dimensión como ustedes la manifiestan en su propia
realidad planetaria. ¡Verdaderamente, realmente es así de básico!
No es mi intención alargarme, así que
para cerrar permítanme recordarles que sean también agradecidos. Muéstrense
agradecidos por todo. Ya sea su salud, sus niños, su hogar, los alimentos que
tienen para comer....
Agradezcan
al Padre y a la Madre muchas veces a lo largo del curso del día.
Aunque no siempre aparente ser así, es
un tremendo honor y una bendición andar en el planeta Tierra en forma humana
durante estos tiempos tan ilustres. Su concepto de llevar un diario de la
gratitud es uno bueno, uno que también les sirve para recordarles de estar
agradecidos siempre.
Me gustaría sugerir que lleven uno y lo
pongan al corriente cada noche al irse a acostar. Y por favor manténganse
lejos de aquello que hace bajar su vibración, ya sea una persona, un lugar o
una actividad. Su saludable energía es un componente clave de la
totalidad.
Sepan que no pueden equivocarse cuando
mantienen en mente que la amabilidad y la gratitud son las piedras angulares
del proceso de ascensión.
Al menos han tenido que ganar la
maestría de este mismo concepto. Compártanlo. Enséñenlo. Luego aventúrense
adelante con un corazón otorgador.
Desde mi propio amoroso corazón, me
despido deseándoles honor y paz. Soy Atenas.
Traducción: Gloria Mühlebach
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