jueves, 15 de marzo de 2012

Jeshua Y María Magdalena: - El retorno de la 'mujer salvaje'


Jeshua y María Magdalena:
El retorno de la 'mujer salvaje'

Canalizado por Pamela Kribbe


Queridos amigos,

Los tres estamos hoy aquí presentes: Jeshua, María y María Magdalena. Nos sentimos honrados de estar aquí con ustedes. Los vemos como nuestros hermanos y hermanas. Somos uno en el corazón y para mí, Jeshua, es muy liberador el estar aquí junto a mis amigas.

Porque estoy a menudo catalogado como el representante de la energía de Cristo. Eso no es toda la verdad, sin embargo. Hubo mujeres a mi lado en mi vida que fueron esenciales para mi misión. En aquellos tiempos, no era aceptable para las mujeres hacer lo que hice, ser un maestro público.

Pero mi Madre y María Magdalena eran guerreras espirituales. Ellas me ayudaron a plantar las semillas de la conciencia crística.

Hoy en día hablamos de las energías masculinas y femeninas. Mi compañera del alma femenina y yo hablamos con una sola voz. En su historia, la energía femenina se ha convertido en una herida de una manera profunda.

Esto ha tenido consecuencias importantes tanto para las mujeres como para los hombres en la Tierra. No son sólo las mujeres que han sufrido con la dominación masculina, los hombres también han resultado heridos.

Primero hablaremos sobre la herida femenina. 

Les pedimos que imaginen una persona del sexo femenino. Ella representa la totalidad de la energía femenina. Ahora bién la energía femenina ha sido degradada y tratada con violencia.

El efecto que esto tuvo en las mujeres es que se retiró de la parte inferior del cuerpo, donde reside su poder. Sobre todo cuando ha habido violencia sexual, el trauma emocional que causa a las mujeres a retractarse de su conciencia de la parte inferior de su cuerpo. Se hace difícil para ellas ser auto-consciente y conectada a tierra.

Contemplar a una mujer delante de su ojo interior. Representa la energía colectiva de las mujeres. En esta imagen se puede ver que hay una especie de agujero en la zona de su vientre. Su conciencia ha sido retirada de esta zona y ella se siente insegura porque carece de base o fundamento.

Dentro de su vientre pueden oír gritos de angustia y dolor. Y nos gustaría invitar a todos ustedes, hombres y mujeres, para irradiar luz a esta mujer, a su vientre. De esta manera también se lo están dando a si mismos.

Ahora María Magdalena quiere hablar.

Yo soy María Magdalena. Los amo profundamente. Yo estoy siempre con ustedes. Me he elevado por encima de la herida de la mujer y ahora quiero tocar esta zona de dolor muy suavemente para ayudar a las mujeres a sanar.

Me gustaría verlas nacer de nuevo con alegría y firmeza, para que el poder de la mujer pueda regresar en forma pacífica. Yo no quiero pelear o luchar. Vengo en paz y tengo una petición especial para las mujeres.

Todas ustedes han sido heridas en la historia, pero en este momento en que están recuperando su fuerza. Esta es su edad, este es su tiempo. Quiero recordarles que los hombres necesitan ayuda ahora también. Ustedes, como mujeres están familiarizadas con la herida en el abdomen, el dolor y el trauma de ser degradado. Pero, ¿qué pasó con los hombres?

Debido a que las energías masculinas fueron las dominantes en el pasado y las energías del poder y la opresión, los hombres se vieron obligados a cerrar sus corazones. Tenían que ser fuertes y duros, esta fué la imagen ideal de ser hombre. Pero de esa manera los hombres se alejaron de sus sentimientos.

Muchos hombres se encerraron en sus cabezas, se hizo difícil para ellos expresar sus emociones y sus sentimientos. La incapacidad de conectar con su lado sensible, su lado femenino, eso también es una herida.

Ustedes no viven la vida plenamente si no pueden acceder a sus sentimientos. De hecho, ustedes están desconectados de su alma.

En muchos hombres, hay una sensación de soledad y alienación que puede ser percibido como un agujero en su corazón.

Así que ya ven: los hombres y las mujeres han sido heridos en el pasado. La herida de la Mujer se encuentra en el vientre, la herida de los hombres es como un agujero en su corazón. Me gustaría decir a las mujeres de hoy que, a medida que recuperan su poder, y reconocen su verdadera fuerza: lleguen a los hombres.

Ellos necesitan su ayuda, se han alejado, alejados y desalineados de su hogar. Tengan la bondad en sus corazones y ser compasivas con ellos. La Nueva Tierra sólo puede nacer si los dos hacen la paz. Si los hombres y las mujeres comprenden cada uno sus heridas, un puente puede ser contruido entre ellos/as.

Pido a las mujeres que se unan conmigo en el envío de luz al orificio en el abdomen. Desde ésta luz, un cable o cordón se desarrolla y va directamente a la Tierra. Sientan su conexión con la Madre Tierra como la mujer que son.

Su energía femenina es tan poderosa y esencial para la vida. Recuerden su verdadera fuerza. A medida que sienten su conciencia crecer, alcancen a los hombres y envien luz al agujero en su corazón.

Están al borde de una nueva época en la historia. Están destinados a unirse los hombres y las mujeres. Ustedes están invitados a tener la alegría y la risa de nuevo como seres humanos. A muchos de ustedes los veo guerreros cansados, que han luchado y luchado y algunos de ustedes muy cansados y decepcionados.

La respuesta a su dolor se encuentra en una vida muy sencilla. Con esto quiero decir: sentirse realmente conectado a la tierra otra vez y disfrutar de los placeres simples del ser humano. Experimentar el amor entre hombres y mujeres, tener amistad con personas con ideas afines y vivir en paz con su entorno y con la naturaleza es la promesa de la nueva Tierra.

En mi vida en la Tierra experimenté la herida femenina profundamente. Yo era una amiga querida de Jeshua. No sólo podía sentir su fuerza y su sabiduría, sino también sus dolores y sus dudas. Había una comprensión íntima entre los dos.

Experimenté un profundo dolor y tristeza cuando tuvo que dejar la Tierra, cuando fue asesinado. A menudo, cuando hablaba con nosotros, yo podía sentir sus mensajes no sólo en mi cabeza, sino por todo mi cuerpo. No me gusta discutir sobre sus ideas, sus mensajes, al igual que sus discípulos varones lo hicieron.

En ese sentido, yo era un poco diferente a ellos. A veces se burlaban de mí y me sentía sola a veces. Estaba considerada como una "mujer salvaje", que poco convencional.

En la actualidad, estoy realmente feliz de ver que las mujeres salvajes son bienvenidas de nuevo en el mundo! Mucho ha cambiado desde los tiempos de Joshua. Yo os digo: las mujeres salvajes serán las líderes del nuevo mundo!

Yo invito a todas a levantarse en su verdadero poder. En el pasado, cuando las mujeres eran "salvajes", es decir, independientes, poco convencionales y apasionadas, fueron etiquetadas a menudo como histéricas. En la Edad Media, se las llamaba brujas.

Pero en realidad, esas mujeres, (yo era una de ellas) - se movieron por el amor. Ahora es el momento de nuevo para las mujeres mostrar su verdadero poder, no de cualquier manera agresiva, pero de un modo que concilie las energías masculinas y femeninas.

Muchas gracias por estar hoy aquí conmigo!


© Pamela Kribbe 2012
Canalizado por Pamela Kribb
Traducido por Tony de Pablo e
www.jeshua.net
http://www.jeshua.net/
Pueden copiar o compartir siempre que se respeten los créditos. Gracias.

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